Nuestro producto principal son los coloretes, estos tienen diferentes tonos y con olores afrutados como ahora fresa, sandía o melocotón. La característica de estos coloretes es que son veganos y cruelty free, por lo tanto, no se testa con animales y tiene un impacto positivo en el medioambiente, además de que el packaging de nuestros productos están hechos de materiales reciclados, ya sea cartón reutilizado o plástico proveniente de otros productos hechos, claramente, con plástico.
Hemos querido ir un poco más allá y, además de ofrecer alternativas para evitar el máximo impacto negativo en el medioambiente, hemos realizado unas paletas que permitan a nuestros consumidores diseñar su paleta de coloretes ideal con sus tonos preferidos. De esta manera, tendrá todo en un mismo espacio evitando las pérdidas y ahorrando espacio.
Los coloretes gløde ofrecen una gran variedad de tonos, pues queremos que todos nuestros clientes encuentren su tono o tonos ideales para el día a día. Cabe resaltar que todos ellos pueden utilizarlo cualquier persona, independientemente de su tono de piel, pues suele pasar que personas con piel más oscura no pueden ponerse algunos productos, ya que la fórmula no es la adecuada para ellos/as. Nuestra empresa fomenta la igualdad y por ello hemos pensado en todos y todas, creando un producto cuya fórmula permite a cualquier ser humano ponerse nuestro colorete. Además, la pigmentación de estos es modulable, de esta manera el consumidor puede ir aumentando la pigmentación a su gusto, fomentando otra vez más la igualdad a través de nuestros productos.
Nuestro packaging apuesta por colores bastante planos pues lo que queremos dar a entender es que, al igual que nuestro packaging, el rostro de nuestros clientes es como un lienzo en blanco y que el color que necesitan es ese que aportan nuestros coloretes. Además, aquello a lo que le queremos dar más importancia es al producto en sí, por lo tanto, pensamos que la mejor opción era hacer un packaging minimalista y que no llamara tanto la atención para no opacar al producto en sí y que la gente compre nuestros productos no solo por lo bonito que puede ser sino también por la calidad que estos tienen.
